Líbano. El informe Media Ownership Monitor de RSF revela que los medios libaneses son “un asunto de familia”
Aunque se suele considerar a los medios libaneses como los más libres del mundo árabe, el informe sobre la propiedad de los medios, Media Ownership Monitor, de Reporteros sin Fronteras revela que están en manos de grupos políticos y ciertas sagas familiares ricas, y supeditados a intereses políticos locales o extranjeros.
Reporteros sin Fronteras y el Centro Skeyes para la Libertad de Prensa y Cultura de la Fundación Samir Kassir presentaron este 6 de diciembre en Beirut su investigación, basada en el análisis de 37 de los principales medios de comunicación libaneses. El informe revela que el panorama mediático del país está altamente concentrado, politizado y polarizado. La aparente diversidad de los medios libaneses enmascara muchos obstáculos a la libertad de información.
Los partidos políticos y las dinastías familiares están omnipresentes en la escena mediática. En comparación con los otros 16 países examinados en el proyecto Media Ownership Monitor, los medios libaneses tienen la tasa más alta de afiliación política: el 78.4% de la muestra estudiada es propiedad directa del Estado, de partidos o de políticos (candidatos a la presidencia, diputados en ejercicio o no).
En cuanto al marco legislativo, no se garantiza una transparencia genuina para los propietarios de los medios de comunicación ni evita conflictos de intereses, debido a disposiciones legales obsoletas o no aplicadas.
La exhaustiva investigación periodística, presentada este 6 de diciembre en Beirut, revela por primera vez quiénes son los dueños de los medios libaneses, cuáles son sus intereses y cuáles son sus estructuras y conexiones subyacentes. El informe Media Ownership Monitor sobre la propiedad de los medios en el Líbano, está disponible, en árabe e inglés, en la web https://lebanon.mom-ltpszjrkmr.oedi.net
Iniciado por Reporteros sin Fronteras, las investigaciones sobre la propiedad de los medios de Media Ownership Monitor son parte de un proyecto global de investigación y promoción para fomentar la transparencia y el pluralismo mediático en todo el mundo. Financiado por el gobierno alemán, este proyecto ya ha permitido estudiar la propiedad de los medios en 16 países: Albania, Brasil, Camboya, Colombia, Ghana, Marruecos, México, Mongolia, Perú, Filipinas, Serbia, Sri Lanka, Tanzania, Túnez, Turquía y Ucrania.