Alí Jalil, del diario al-Zaman, fue secuestrado en Bagdad y después apareció muerto, el 20 de mayo de 2007, elevando a 177 el número de periodistas y colaboradores de medios de comunicación muertos en Irak, desde marzo de 2003. “Sin estos valientes profesionales, Irak se convertiría en un agujero negro informativo”, ha declarado Reporteros sin Fronteras. Por otra parte, hay otro periodista al que se da por desaparecido, que hace el número 13.
Reporteros sin Fronteras condena el asesinato en Bagdad de Alí Jalil, del diario al-Zaman (El Tiempo), ocurrido el 20 de mayo de 2007 y el secuestro, el 9de mayo, del periodista Salam Douhi Al-Soudani.
“Menos de tres días después de la desaparición de dos colaboradores del canal norteamericano ABC, de nuevo la profesión está de luto por este asesinato. Los periodistas iraquíes corren riesgos incalculables para continuar haciendo su trabajo. La prensa se ha convertido en un objetivo porque ahora juega un papel muy importante en la reconstrucción del país. Sin esos valientes profesionales, Irak se convertiría en un agujero negro informativo”, ha declarado Reporteros sin Fronteras.
Alí Jalil, de 22 años, fue secuestrado el 20 de mayo de 2007 en el barrio de Al-Bayaa, al sur de Bagdad. Junto con su mujer, acababa de salir de la casa de un miembro de la familia cuando unos hombres armados, que iban en dos vehículos, le cortaron el camino. Se marcharon llevándose al periodista y abandonando a su mujer en la calzada. Muchos colegas acudieron al barrio para lanzarse a la búsqueda de Alí Jalil, pero una hora más tarde la policía encontró su cuerpo, acribillado a balazos en la cabeza y la espalda. Según las informaciones recogidas por la organización, Alí Jalil se convirtió en blanco tras publicar un artículo sobre los grupos armados. En su texto citaba a algunos parlamentarios, que pedían a las autoridades la eliminación física de los miembros de dichos grupos.
Por otra parte, no se tienen noticias de Salam Douhi Al-Soudani, un periodista de unos cincuenta años. Entre otras cosas, trabajó como secretario de redacción en Babel, que pertenecía a Uday Hussein, hijo del anterior jefe del Estado iraquí. Más recientemente, colaboraba en el diario al-Zaoura, que dejó de publicarse por problemas económicos. Desapareció el 9 de mayo de 2007 en el barrio de al-Latifiya que, junto con los barrios de al-Iskandaria y al-Mohammadiya, situados en el sur de Bagdad, forman el “triángulo de la muerte”.
En Irak han matado al menos a 177 periodistas y colaboradores de medios de comunicación desde el comienzo del conflicto armado, en marzo de 2003. Dos se dan por desaparecidos y actualmente hay trece retenidos como rehenes.
En otro caso, el ejército norteamericano iruumpió el 18 de mayo de 2007, y por segunda vez desde el comienzo del año, en los locales del diario al-Da'oua, órgano de prensa del partido chiíta al-Da'oua al-Islamiya. Según el periodista de la redacción Alí Al-Khayat, en el registro, que duró más de tres horas, los soldados norteamericanos habrían confiscado muchos dossier.