Dos periodistas condenados a muerte: Reporteros sin Fronteras pide la intervención de Ban Ki-moon

El 13 de agosto de 2007 Reporteros sin Fronteras ha dirigido un correo al Secretario General de Naciones Unidas, para que inste a la República Islámica de Irán a mantener sus compromisos internacionales después de que, el pasado 16 de Julio, fueran condenados a muerte los periodistas Adnan Hassanpour y Abdolvahed Botimar. “Se han burlado los derechos más elementales de Adnan Hassanpour y Abdolvahed Botimar, ya que no les han dejado asistir al momento en que se dictó la sentencia de su juicio. Más escandaloso aún, no se les informó de la sentencia y se enteraron al leerla en el periódico”, ha manifestado Reporteros sin Fronteras en su carta a Ban Ki-moon. Adnan Hassanpour y Abdolvahed “Hiva” Botimar recibieron, el 8 de agosto de 2007, la visita de un miembro de su familia en la cárcel de Sanandaj (Kurdistán iraní). Ambos, que se encuentran en celdas individuales, se enteraron de su condena al leer el diario Kauhan. Desde hace cerca de treinta días se encuentran en huelga de hambre, con el único aporte calórico de agua azucarada. En su carta, la organización ha recordado también que, en total, actualmente hay once periodistas privados de libertad por ejercer su profesión en ese país. Mientras que algunos de ellos cumplen condenas, tras haber sido condenados en juicios inicuos, otros llevan meses detenidos sin juicio. Soportan unas condiciones de detención deplorables y no tienen acceso a tratamientos medicos. “El regimen de Teherán, cuya campaña contra los medios de comunicación independientes se asemeja a una caza de brujas, ha acosado e intimidado a varios periodistas. Un gran número de ellos han comparecido, y siguen compareciendo, ante los tribunales para responder de cargos objetivamente infundados que, sin embargo, considera admisibles una justicia a las órdenes”, ha escrito Reporteros sin Fronteras. “Estos hombres necesitan saber que usted está a su lado. Gracias a la actuación de Naciones Unidas podrán recuperar un aspecto de dignidad y la libertad para hacer su trabajo. Estamos seguros de que usted encontrará medios y argumentos para conseguir que Irán respete las disposiciones del Pacto Internacional relativo a los derechos civiles y politicos, que ratificó en su momento”, ha añadido Reporteros sin Fronteras. Soheil Assefi, colaborador de varios medios de comunicación, quedó en situación de detenido el 4 de agosto de 2007, tras presentarse a una citación del tribunal de Teherán. Pocos días antes, unos agentes de la fiscalía registraron su domicilio y se incautaron de documentos, así como de su material informático. Internado en la cárcel de Evin (Teherán), no se conocen los cargos que se le imputan. El 9 de agosto, el periodista pudo telefonear a un miembro de su familia, pero no tiene autorización para recibir visitas. Farshad Gorbanpour, también internado en la cárcel de Evin, fue detenido sin motivo el 31 de julio. Según su esposa, que ha podido visitarle una vez, está acusado de “acción contra la seguridad nacional” y podría quedar en libertad a cambio del pago de una fianza de 200 millones de tumans (el equivalente a 158.000 euros). El 21 de julio unos agents del Ministerio de Inteligencia detuvieron, en la sede del periódico, a Ako Kurdnasab, periodista del semanario Karfto, tras ser examinado por la sala cuarta del tribunal de la ciudad. Internado en la cárcel de Sanandaj, se encuentra en espera de juicio. No se conocen los cargos que se le imputan y su familia carece de noticias. Ejlal Ghavami, del semanario Payam-e mardom-e Kurdestan (suspendido en 2004), se encuentra detenido desde el 9 de Julio. El pasado 9 de junio, el tribunal de Sanandaj le condenó a tres años de cárcel por “incitar a la población a la revuelta” y “acción contra la seguridad nacional”. El periodista tendría una infección ocular. Por su parte, Mohammad Sadegh Kabovand, director de Payam-e mardom-e Kurdestan, fue detenido el 1 de julio de 2007 y trasladado a la cárcel de Evin. Efectuó ocho días de huelga de hambre, en señal de protesta por su aislamiento. Según informaciones recogidas por Reporteros sin Fronteras, estaría recibiendo muchas presiones con el objetivo de hacerle desmentir las informaciones publicadas por la organización de Derechos Humanos de Kurdistán, de la que es uno de los fundadores. Estaría acusado de “acción contra la seguridad nacional”. Said Matinpour, del semanario Yarpagh (periódico en lengua azarí publicado en Teherán), se encuentra en la cárcel desde el 28 de mayo de 2007. Detenido al mismo tiempo que su esposa, en su docilio de Zanajan (Noroeste), dos días más tarde fue trasladado a Teherán. Se encuentra aislado en el dormitorio de seguridad 209 de la cárcel de Evin. No se le ha imputado ningún cargo. Ni sus familiars, ni su abogado, han podido visitarle. Otros tres periodistas se encuentran en la cárcel desde 2006. Kaveh Javanmard, del semanario Karfto, fue detenido el 18 de diciembre de 2006 en Sanandaj. El 17 de mayo de 2007 le condenaron a dos años de cárcel, en un juicio a puerta cerrada, por “incitar a la revuelta” y “acción contra la seguridad nacional”. Alí Farahbakhsh, colaborador de varios periódicos económicos, entre los que se encuentra Sarmayeh, fue detenido el 27 de noviembre de 2006 y condenado, el 26 de marzo de 2007, a tres años de cárcel por “espionaje”. Actualmente cumple su pena en el dormitorio de seguridad 209 de la cárcel de Evin, donde durante mucho tiempo le privaron de sus medicinas. Finalmente, Mohammad Hassin Falahieh, periodista del servicio en lengua árabe del canal Al-Alam (radiotelevisión del Estado iraní), está encarclado desde el mes de noviembre de 2006. Acusado de “espionaje”, un tribunal de la revolución le juzgó el 29 de abril de 2007, y le condenó a tres años de cárcel. También cumple la condena en el dormitorio de seguridad 209 de la cárcel de Evin. Según su abogado, está enfermo y necesita tratamiento. Firmar la petición para la libertad de los dos periodistas