Cincuenta aniversario del inicio de la Revolución castrista : Reporteros sin Fronteras manifiesta públicamente su apoyo a los 23 periodistas detenidos en la isla
En la víspera del cincuentenario del desembarco del barco Granma en Cuba, que significó el inicio de la Revolución castrista, el 1 de diciembre de 2006 Reporteros sin Fronteras ha manifestado su apoyo a los veintitrés periodistas encarcelados en la isla, en la Explanada de los Derechos Humanos, de París.
El 1 de diciembre de 2006, en la Explanada de los Derechos Humanos, Reporteros sin Fronteras ha manifestado públicamente su solidaridad con los periodistas cubanos encarcelados. Con asistencia de prensa francesa y extranjera, y de personalidades cubanas exiliadas, entre las que había periodistas disidentes, la organización ha instalado veintitrés jaulas en la Plaza del Trocadero, en cada una de las cuales había un detenido voluntario, encapuchado y con traje de preso. En cada una de las jaulas figuraba el nombre, el medio de comunicación al que pertenece, la duración de la condena y las causas del encarcelamiento de cada periodista encarcelado.
“El cincuentenario del desembarco del Granma, el 2 de diciembre de 2006, clausura cinco días de celebraciones de los 80 años de Fidel Castro, obligado a traspasar el cargo a su hermano Raúl el pasado 31 de julio, por razones de salud. La celebración debía coincidir con su regreso al poder, comprometido por la evolución de su estado. Tanto si el Líder Máximo retoma sus funciones de jefe del Estado, como si no lo hace, Cuba sigue siendo la segunda cárcel del mundo para la prensa. Veintitrés periodistas pagan con su libertad haber querido informar al margen del control del Estado”, ha declarado Reporteros sin Fronteras.
“El gobierno cubano se honraría poniéndoles en libertad, como hizo el 20 de noviembre con uno de sus colegas. Esperamos que las personalidades extranjeras, invitadas a las ceremonias de La Habana, recojan esta petición. Cuba, que desde el 11 de septiembre de 2006 asume la presidencia rotatoria del Movimiento de los No-alineados, tiene que cumplir los compromisos que aquel día asumió, en materia de respeto de los derechos humanos”, ha añadido la organización.
Continúan encarcelados veinte de los veintisiete periodistas detenidos, y condenados, en la oleada represiva de marzo de 2003, entre ellos el corresponsal de Reporteros sin Fronteras, Ricardo González Alfonso. Acusados en su mayor parte de ser “mercenarios al servicio de una potencia extranjera”, cumplen condenas que van de 14 a 27 años de cárcel. Encerrados en celdas insalubres, en ocasiones mezclados con presos comunes, padecen diariamente los malos tratos de sus guardianes, la privación del contacto con sus familia y el racionamiento de las medicinas que precisa su estado de salud, que cada vez es peor. En la mayoría de los casos, la propia medicina carcelaria ha estimado que el estado de salud de estos presos es incompatible con la detención. Desde hace ocho meses, uno de ellos, Juan Carlos Herrera Acosta, se niega frecuentemente a comer, como protesta por su suerte.
En 2005 y 2006 se sumaron tres periodistas a esa larga lista. Alberto Gil Triay Casales, Roberto de Jesús Guerra Pérez y, en el pasado mayo, Armando Betancourt. El primero está oficialmente inculpado de “alteración del orden público”, pero sigue esperando la condena. Los otros dos están detenidos sin que la Seguridad del Estado (policía política) haya presentado el menor cargo contra ellos. Un cuarto periodista, Oscar Mario González Pérez, detenido sin motivos el 22 de julio de 2005, salió en libertad el 20 de noviembre de 2006, sin mayores explicaciones. Ha cumplido, por nada, un año y cuatro meses de cárcel.
Finalmente, el acoso, la intimidación y la violencia hacia la prensa independiente no han cesado durante los cuatro meses de poder interino de Raúl Castro. En Cuba, un periodista está solo en libertad vigilada.
El 2 de diciembre de 1956, el barco Granma, procedente de México, fondeaba en Cuba llevando a bordo a los hermanos Fidel y Raúl Castro, a Ernesto “Che” Guevara, y a sus principales compañeros de lucha. El episodio significó el inicio de la Revolución castrista y el derrocamiento, dos años más tarde, de la dictadura de Fulgencio Batista. En la víspera del cincuentenario de aquel acontecimiento, Reporteros sin Fronteras quiere recordar que, a partir de entonces, una dictadura sucedió a otra, y manifiesta públicamente su apoyo a los veintitrés periodistas encerrados en calabozos cubanos, por haber querido informar libremente.
Toda la información actualizada sobre los veintitrés periodistas detenidos figura en el sitio web de Reporteros sin Fronteras.