Reporteros sin Fronteras quiere saber los motivos exactos de la convocatoria que ha recibido Raúl Wiener, del diario La Primera, prevista para el 14 de enero de 2009 por un “delito contra la tranquilidad pública y terrorismo”. El caso, que podría tratarse de un arreglo de cuentas políticas, presenta muchos peligros para el secreto de las fuentes y la libertad de informar.
Reporteros sin Fronteras querría conocer los motivos exactos del procedimiento, por “delito contra la tranquilidad pública - terrorismo”, abierto a Raúl Wiener, jefe de la sección de investigación del diario La Primera. Precisamente el periodista reveló la apertura de un procedimiento del mismo tipo a trece personas, sospechosas de tener relaciones con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). El 14 de enero de 2009 tienen que interrogarle, por primera vez en el marco del caso.
“Por principio resulta sospechoso el hecho de que hayan añadido el nombre de Raúl Wiener a la lista de las trece personas encausadas en ese procedimiento. ¿Es que los servicios de inteligencia quieren conocer sus fuentes? Citarle como testigo habría sido más que suficiente aunque, a pesar de todo, se trataría de una violación de un principio fundamental de la libertad de prensa. Por otra parte, el hecho de que un periodista procedente de un periódico considerado de izquierda investigue un caso en que se menciona a las FARC ¿justifica que a él, y a su publicación, se les considere sospechosos de connivencia con dicho grupo armado?”, ha declarado Reporteros sin Fronteras.
El 11 de enero de 2009 notificaron a Raúl Wiener la citación - en calidad de acusado y no de testigo, precisó el periodista a la organización - para un interrogatorio previsto para el 14 de enero, en el marco de un procedimiento por “delito contra la tranquilidad pública - terrorismo”, sin darle más detalles.
En noviembre de 2008 el periodista reveló la existencia de la investigación abierta, por el mismo motivo, a trece de sus compatriotas cuyos nombres habrían aparecido en el ordenador portátil de Raúl Reyes, el antiguo número dos de las FARC al que el ejército colombiano mató en territorio ecuatoriano el 1 de marzo de 2008. Las trece personas son dirigentes de la izquierda peruana. Raúl Wiener reveló también que la policía había solicitado a la justicia que le detuviera.
“Lo que quieren es callarme y que deje de difundir denuncias por los abusos de la policía. Quieren saber como conseguí documentos sobre la investigación policial. Yo no voy a divulgar mis fuentes”, aseguró Raúl Wiener a Reporteros sin Fronteras. “Al principio investigaban a 13 dirigentes de izquierda. Ahora yo soy el 14, mientras que mi nombre nunca apareció en ese ordenador”, añadió el periodista. Raúl Wiener considera que está siendo víctima de “represalia y venganza” políticas. Su suerte ya generó protestas en las filas del Congreso, en Lima. En cuanto al gobierno desmintió cualquier implicación en el asunto.