Liu Di se encuentra encarcelada desde hace cuatro meses, en un lugar que la policía se niega a precisar, por haber "puesto en peligro la seguridad nacional". Reporteros Sin Fronteras se pregunta: ¿Cómo una estudiante de 22 años, sin ningún compromiso político, puede poner en peligro la seguridad de la China Popular? La organización pide su liberación inmediata.
Hoy hace cuatro meses que Liu Di, estudiante de psicología, se encuentra detenida por la policía. Su familia todavía no ha recibido autorización para verle. Las autoridades le acusan de haber "puesto en peligro la seguridad nacional", y afirman querer "presionarle", manteniéndole detenida en secreto. Pero según personas cercanas, Liu Di no hizo otra cosa que expresar en Internet sus deseos de libertad.
Reporteros Sin Fronteras lamenta el trato infligido a Liu Di, de 22 años de edad, desde su detención en noviembre de 2002, y se pregunta: ¿Cómo puede poner en peligro la seguridad de la China Popular una joven internauta, sin ningún compromiso político? La organización pide la inmediata liberación de Liu Di, y la retirada de los cargos que pesan sobre ella. Reporteros Sin Fronteras recuerda que China firmó el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.
La familia de Liu Di confirmó a Reporteros Sin Fronteras que la joven internauta permanece detenida en secreto. La policía se niega a precisar el lugar de su detención. Los padres solamente han recibido dos cortos mensajes de su hija, en los que les pedía dinero. Pudieron depositar, en una comisaría, dinero y algunas ropas, sin que eso suponga que estén seguros de que su hija los haya recibido.
Tras la detención de Liu Di, la policía solamente indicó a su familia que estaba detenida por haber "puesto en peligro la seguridad nacional". Según los policías, era necesario mantener la "presión" sobre la estudiante, durante la investigación. Sus padres están preocupados por la realidad que encubre la palabra "presión", utilizada por los policías, a pesar de que éstos afirman que la joven goza de buena salud.
El padre de Liu Di explicó a Reporteros Sin Fronteras que no entiende por qué su hija, que firmaba sus mensajes en Internet como "La sonrisa inoxidable", se encuentra encarcelada por haber puesto en peligro la seguridad nacional. "Adoraba navegar en Internet para buscar informaciones. Pero estaba frustrada por la falta de libertad en Internet, y ha podido expresar críticas o sarcasmos, aunque sin pensar nunca en las consecuencias de esos mensajes", precisó Liu Qinghua.
Por otra parte, la policía advirtió a la familia que la naturaleza de este asunto podría cambiar si los medios de comunicación extranjeros, las organizaciones de defensa de los derechos humanos y los disidentes chinos dejaban de armar jaleo con el caso de Liu Di.
El 7 de noviembre de 2002, en vísperas de la inauguración del decimosexto Congreso del Partido Comunista Chino, Liu Di fue detenida en el campus de la Universidad de Pekín. Su familia no tuvo noticia de la detención hasta que acudió la policía para efectuar un registro del domicilio, e incautarse de sus notas, sus libros y su ordenador.
Al menos treinta y seis ciberdisidentes se encuentran actualmente encarcelados en China.